Utopía.

Ayer, se quedo una amiga a dormir en mi casa y vimos justo antes de dormir mi película favorita, Monstruos S.A. y, sé que no tiene nada que ver con la película pero me puse a pensar, supongo que fue porque ya me la sé de memoria, el caso es, que me di cuenta de que no sabemos nada de la vida, ni de nosotros mismos y cuanto más creemos que conocemos a una persona más nos alucina. Y cuanto más lo pienso, más me alucina la humanidad.

Mientras yo estoy aquí con frío escribiendo este relato, seguramente haya una pareja besandose en cualquier otra punta del mundo, sin frío, enamorados, unidos pero en realidad, aunque ellos piensen que se conocen, incluso mejor que a ellos mismos, será imposible, el ser humano es enrevesado, hace cosas en ocasiones inexplicables, habla, miente, inventa, es tan abstracta la mente humana que ni siquiera dos personas que nacen para vivir unidas, en pareja, se conocen realmente. Es más, es alucinante como en hasta dos metros de persona puedes caber tantas y tantas cosas, tantos sentimientos, tantos pensamiento, tanto amor.

Eso es lo que hace especial al ser humano y a cada persona en particular, que jamás nadie logrará conocernos realmente, ni nuestra mitad.

Esta entrada, no sé muy bien por qué, quiero dedicarsela a los millones de enamorados que hay en el mundo, vivid enamorados, disfrutad cada día y por supuesto, vivid por y para vuestra mitad porque esta será la que os forme como personas y será la que mejor os conocerá sin llegar a conoceos plenamente, pero bueno, eso es lo importante ¿no? Conocerse cada día mejor hasta el final. Y después también.