Caminábamos despacio, muy despacio. De la mano como siempre y hablando cuando de repente me replantee el hecho de que era absurdo, lo nuestro, nuestra relación, ya que se basaba en conocernos el uno al otro cada vez más.
-No creo que esto vaya bien, no somos normales, jamás lo seremos y en este mundo no encajamos, no somos una pareja normal.
+¿Por qué?
-Hablamos en vez de...-paré unos segundos- bueno, tú ya me entiendes.
+Disfruto hablando contigo más que, bueno, ya sabes-sonrió-además ¿y qué si no encajamos? ¿y qué si no somos una pareja normal? Somos nosotros y punto.
-Lo demás da igual-sonreí.
Noté como me apretó la mano en señal de confianza. Vale, hay parejas no normales pero ¿por eso tienen que ser anormales? Ni mucho menos, tan solo son diferentes, ven el amor desde otro punto de vista tan bonito o aún más que la manera tradicional.
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